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SISMOS & TSUNAMIS : EN LIMA; LA CAPITAL

PERO OJO Y TREN : DESPUES DE ROBADO, EL CANDADO

Publicado: 2016-10-28


POR: DENNIS FALVY

Después de soplarme la absurda discusión para los 3 miembros que faltaban en el directorio del banco central y que la verdad es irrelevante, pues hay por allí uno que funge de economista que le echa flores al gordo bandido del Velarde en la Tv del cable o el PPK que abre la bocota para decir que Chlimper está capacitado para el puesto y los del Frente Amplio, que no entienden que los fujimoristas pueden hacer lo que le da la regalada gana con su 72 congresistas , me puse a leer una parte adicional de un excelente trabajo que hiciera Richard Webb hace muchos años para el BCRP y vaya que a las 10:47 p.m. según he tomado nota, fue la hora que hubo 2 buenos remezones ; entiendo de casi 5 grados en la escala de Richter , que se sintió en Lima y Callao y que al menos a mi me recordaron que la probabilidad de un terremoto en serio, no escapa de una posibilidad con su agregado de un tsunami, antes conocido como “maremoto”.Se señala entonces que tuvo este una intensidad de grado IV y una profundidad de 49 kilómetros, según informó el Instituto Geofísico del Perú. Su epicentro fue a 57 kilómetros al oeste del Callao. Al poco tiempo RPP mediante Hernán Tavera, director de sismología del Instituto Geofísico del Perú (IGP), informaba al respecto y daba algunos consejos para quienes viven en edificios, que mejor se queden en sus apartamentos y busquen las zonas que tengan vigas y columna, pues como los sismos duran unos 60 segundos no recomendaba ir por las escaleras. Luego parece que , señaló que existen algunos factores que hacían que un sismo se sienta con una mayor intensidad; por ejemplo la cercanía al epicentro y la profundidad. Reveló entonces que el temblor tuvo su epicentro a 58 kilómetros al oeste del mar del Callao y una profundidad de 52 kilómetros. “El nivel de cercanía al mar y la poca profundidad nos hacen percibir que el evento es mayor”, dijo tras el temblor. También aprovechó para recordar que Perú tiene un silencio sísmico y que se espera un movimiento telúrico de una magnitud de 8,5 grados a más. “Esperemos que esto despierte el interés de la población, que las personas se preparen mejor y tomen con responsabilidad los simulacros”. 

EN  CASI LA MISMA FECHA Y HORA  : 1,746

Es cierto y estamos plenamente advertidos, que se dará un sismo de proporciones mayores, esperemos que no como aquel que se dio en el año 1746 en que luego del terremoto, un tsunami dejo La Punta desolada ; casi sin sobrevivientes y el agua llego supuestamente hasta kilómetros adentro en el puerto del Callao ; incluso algunos señalan que rebaso lo que hoy se conoce como Avenida Saénz Peña. El caso es que el virrey de aquel entonces, hizo su labor, pero mejor copiemos lo que está en el Wikipedia:

EL NEFASTO SISMO DEL AÑO 1746

El viernes 28 de octubre de 1746, a las 10:30 p.m., los habitantes de Lima fueron sorprendidos por las violentas sacudidas de la tierra que obligaron a todos a salir de sus casas y buscar los lugares descampados. Por desdicha no todos pudieron hacerlo y aun aquellos que ganaron la calle vinieron a sucumbir al derrumbarse los muros adyacentes. La confusión y el espanto cundieron por toda la ciudad e hizo que fuese mayor el desconcierto la circunstancia de la hora, aun cuando la oscuridad no era tanta por la iluminación de la luna.

La duración del sísmo, según las relaciones del tiempo, fue de tres a cuatro minutos, tiempo más que suficiente para una destrucción total de la ciudad. Lima tenía 60,000 habitantes y contaba con 3,000 casas, repartida en 150 manzanas. Cayeron las partes altas de templos, conventos, mansiones y diversas construcciones; culminado el sismo nubes de polvo ocultaron la visión de la población.

No es posible dar otras indicaciones del fenómeno porque no las traen las noticias de la época, salvo lo que dice el Marqués de Obando sobre la dirección del movimiento: que su mayor ímpetu parecía venir del noroeste. Según las descripciones que nos han llegado debió ser de magnitud 9.0 Mw en la escala de momento.

La noche fue verdaderamente angustiante, aun sin saberse todavía en Lima la desgracia del vecino puerto del Callao, que fue arrasado por un maremoto. Muchos, para no quedar sepultados entre las ruinas, así como para hallar amparo en la compañía de los demás, se refugiaron en la Plaza Mayor y otros se retiraron al fondo de sus huertas, de modo que en las casas que aún permanecían en pie o entre los escombros de otras reinaba un gran silencio, como lo advierte un autor de la época.

En medio de tan grande confusión y sucediéndose las subsiguientes réplicas, aunque ya no con tanta violencia, no se hizo posible acudir al auxilio de los heridos y de los que gemían sepultados bajo las ruinas. Algunos fueron extraídos de entre los escombros después de haber pasado uno y aun dos días sepultados. Pocos pudieron conservar en aquellos instantes bastante serenidad de ánimo para acudir al socorro de los demás.

La procesión del Señor de los Milagros se realizó por primera vez después del devastador terremoto de 1687, cuando el muro otra vez se mantuvo en pie. Se hizo una réplica en lienzo que salió en procesión desde el humilde barrio de Pachacamilla -hoy distrito del Rímac- hasta la pluricultural Plaza Mayor y las principales calles de la ciudad, y los Barrios Altos. Se declara como fiesta oficial después del terremoto de octubre de 1746.

UN AMANECER DE ESPANTO

Amaneció el día sábado 29 de octubre y los ojos de los sobrevivientes contemplaron con espanto la ruina de la ciudad. De las tres mil casas que componían las ciento cincuenta islas o manzanas que se encerraban dentro de las murallas de Lima, apenas veinticinco se mantuvieron incólumes. Las calles se veían obstruidas por los escombros y el interior de los edificios ofrecía un aspecto desolador. Las torres de la Catedral se desplomaron y cayeron sobre las bóvedas destruyéndolas. Otro tanto sufrieron las torres de las iglesias de San Agustín, La Merced y San Pablo de la Compañía. Prácticamente todas las iglesias, conventos, monasterios, capillas y hospitales, sufrieron más o menos iguales destrozos.

El arco magnífico que estaba a la entrada del Puente de Piedra, coronado por la estatua ecuestre del rey Felipe V (cuya muerte, acaecida el 9 de julio de ese año, se ignoraba todavía en el Perú), se vino al suelo, quedando la escultura desgajada en el suelo y entorpeciendo el paso. En el Palacio virreinal, no quedó un lugar habitable y el Virrey hubo de acomodarse en una barraca de tablas y lona, pero no estaba en mejores condiciones el Santísimo Sacramento que del Sagrario fue conducido a una ramada que se improvisó en la Plaza mayor. El edificio del Tribunal del Santo Oficio quedó igualmente en ruinas.

DESAPARECE EL PUERTO DEL CALLAO BAJO EL MAR

Desde las primeras horas del día comenzaron a circular voces sobre la destrucción del Callao y el virrey envió a aquel puerto a algunos soldados de a caballo, a fin de cerciorarse del hecho. Estos trajeron la confirmación del desastre y a poco ya toda la ciudad lo sabía, pues a ella llegaron también unos cuantos sobrevivientes de la embestida del mar.

Lo que contaron dichos sobrevivientes fue algo horrendo, con ribetes apocalípticos. Media hora después del terremoto se había entumecido el mar y elevado a enorme altura, y con horrible estruendo se había precipitado por dos veces sobre la tierra, que la inundó y barrió todo lo que encontró a su paso. Del antiguo puerto sólo quedaron unos cuantos restos de la muralla y el arranque de las paredes de algunos edificios. El Marqués de Obando, Jefe de la Escuadra y General de la Mar del Sur, dice que los cuatro mayores navíos que había en el puerto, soltando las anclas fueron lanzados por encima del presidio y vinieron a varar el uno dentro de la plaza, el otro, cargado de trigo, a escasa distancia del anterior y los otros dos hacia el sudeste, como a distancia de un tiro de cañón de los baluartes.

El número de los que perecieron en el puerto se calcula en unos cuatro a cinco mil, prácticamente toda la población; sólo se salvaron 200 personas. En un lienzo de muralla lograron salvarse un religioso y unas treinta personas. Otros, en su mayoría pescadores o marineros, acogidos a las tablas y maderos que sobrenadaban fueron arrojados más tarde a las playas o bien a la isla de San Lorenzo. El mar se retiró, pero no volvió a su límite antiguo. Esto significa que hubo una subsidencia cosismica, es decir, toda la zona del Callao se hundió después del terremoto.

IMPACTO EN EL RESTO DE PROVINCIA

La destrucción causada por el sismo se extendió a varios kilómetros a la redonda. Fueron afectadas Cañete, Chancay, y Huaura, hasta 24 leguas al NNO. del Callao; y sufrieron también los valles de Barranca y Pativilca. En Lucanas reventó un volcán de agua caliente inundando toda la quebrada.

Intensidades máximas se evaluaron en el denominado norte chico, con XI en Huacho y X en Chancay; luego el área de Lima y Callao donde varió de IX a X en la zona de Canta y Matucana también se evaluó intensidades de IX, en Cañete VIII, reportes de Trujillo con una intensidad de VI, Cerro de Pasco, Santa y Huaraz VI-VII, Huamanga y Huancayo VI, Arequipa y Cusco . Fue sentido en Moyobamba, Cajamarca, Chachapoyas, Tumbes, Puno y Tacna.

REPORTES OFICIALES

El reporte oficial mencionó más de 10,000 muertos en Lima, Callao y villas adyacentes. En Lima las víctimas no debieron pasar de 2.000, habiendo diversidad en los datos al respecto, lo que se explica por no haberse dado a todos los cadáveres sepultura: muchos quedaron insepultos entre las ruinas y sólo con el tiempo fueron paulatinamente descubriéndose. De todos modos una cifra crecida teniendo en cuenta la población total, de unos 60.000 habitantes. Otras víctimas inevitables fueron los animales domésticos. Se calcula en 3.000 las mulas y caballos que murieron aplastados por los derrumbes.

En el Callao, según el Marqués de Obando, era horrendo el espectáculo de los despojos humanos descubiertos y en las posturas más violentas que se puedan imaginar. Así por el calor propio de la estación como por andar revueltos con las horruras del mar y no ser fácil enterrarlos en el terreno que ocupaban, por ser de cascajo o piedra zahorra e inundarse fácilmente, la fetidez era intolerable.

En cuanto a las edificaciones, en Lima sufrió una destrucción total, excepto 25 casas de las 3.000 que conformaban la ciudad; pero Emilio Perez-Mallaina ha hecho ver que esta información sobre las edificaciones fue exagerada por varios motivos, sobre todo para reducir el interés de los censos de los inmuebles propiedad de la Iglesia católica. Luego del sísmo la tierra continuó moviéndose aunque con menor intensidad. Un reporte de José Eusebio de Llano Zapata describe todas las réplicas: Los movimientos continuaron en forma intermitente hasta las 5:00 a.m. y muchos remezones se sintieron hasta el Cusco y desde el 28 de octubre hasta el 10 de noviembre se produjeron 220 réplicas más, y hasta el 28 de octubre de 1747 fueron un total de 568 temblores.

PÁNICO

Tan abatidos se hallaban los ánimos y tan honda impresión había causado la noticia de la ruina del Callao que el día 30, habiendo comenzado a esparcirse el rumor de la salida del mar, la gente todas, presas de irresistible pánico, comenzaron a huir en bandadas hacia los montes vecinos, sin que en su carrera nadie fuese capaz de detenerlas. El Virrey, sabiendo que la noticia carecía de fundamento, hubo de montar a caballo a fin de contener a la multitud y desvanecer la falsa noticia que con delincuencial intento había comenzado a difundir un negro caballista. Hizo lo mismo el Marqués de Obando en compañía de un religioso franciscano y sólo después de mucho trajinar por todas las veredas que salen al campo se logró que volviera un tanto la calma. Ya cerca del anochecer comenzaron a deshacerse las aglomeraciones de gente de toda clase y condición que se habían formado y empezaron a volver a sus casas con más orden que a la salida.

PILLAJES Y SAQUEOS

Debido a la confusión y desorden que reinaba en todas partes, así como por haber abandonado sus casas los dueños, la baja plebe se entregó al robo y saqueo. Hubo que recurrir a la tropa y el Virrey destinó tres patrullas de soldados con sus correspondientes cabos para que de continuo rondasen toda la ciudad y apresasen a los malhechores. En el Callao se hizo más necesaria esta providencia por los muchos objetos que iba arrojando el mar a la playa, que despertaban la codicia de bandidos y simples buscones. Por esta razón hubo de expedirse un decreto ordenando al Tribunal del Consulado velase por que no se cometiesen robos y recogiese cuanto se hallase a fin de restituirlo a los interesados. Como en toda la extensión de las playas que se suceden desde el Morro Solar hasta La Punta y también por el lado de Bocanegra varaban los restos de la ruina no era fácil evitar la audacia de los merodeadores, pero a fin de reprimirla se publicó un bando amenazando con pena de la vida al que hiciera alguna sustracción y se fijaron dos horcas en la ciudad y otras dos en el Callao, para contenerlos.

ESCASEZ DE ALIMENTOS Y EPIDEMIAS

Los días que se siguieron fueron de angustia, tanto por no cesar de temblar la tierra como por la amenaza del hambre y las epidemias.

Gracias a las acertadas medidas adoptadas por el Virrey se logró abastecer a la población prontamente aunque no tan de inmediato que no se dejara sentir la escasez. Dispuso que de las vecinas provincias se remitiese cuanto antes el trigo almacenado y, convocando a los panaderos, les proporcionó el auxilio necesario, así para abastecerse de harina como de agua, por haberse roto los acueductos y cañerías de la que venía a la ciudad. Encomendó a los alcaldes ordinarios, D. Francisco Carrillo de Córdoba y D. Vicente Lobatón y Azaña la ejecución de estas medidas y de otras al mismo intento, como el abastecimiento de carne fresca.

En cuanto a las epidemias, dice Llano Zapata en su Carta o Diario que hasta mediados de febrero del 1747 habían muerto en la ciudad, víctimas de tabardillo, dolores pleuríticos, disentería y cólicos hepáticos hasta dos mil personas, número excesivamente crecido para la Lima de entonces.

RELIGIOSIDAD POPULAR

Durante esos días luctuosos, las rogativas, procesiones de penitencia y públicas manifestaciones de piedad fueron casi ordinarias y los predicadores de uno y otro clero llenaban las calles con sus voces de gemido, excitando a todos a la desesperacion y al arrepentimiento. A su vez, el virrey encomendó a los hermanos de la cofradía de la caridad la tarea de sepultar los cadáveres y de asistir a los muchos enfermos que no bastaban a contener los hospitales, en ruinas la mayor parte de ellos, pues en el de Santa Ana para indios perecieron 60 de estos infelices, al caer sobre ellos la pesada techumbre de las salas.

LO QUE SEÑALO LA IGLESIA

El clero limeño atribuyó la desgracia a la ira divina desencadenada por una serie de razones, a saber:

• Las injusticias que se cometían contra los pobres.

• Las prácticas ilícitas de la codicia y la usura.

• El torpísimo pecado de la lujuria.

• La vanidad de las mujeres con sus escandalosos vestidos, en especial los escotes demasiados abiertos.

La fe católica no sufrió merma y más bien se incrementó notablemente la devoción al Señor de los Milagros, venerada imagen que solía ser sacada en procesión en eventos de ese tipo, manifestación admirable de fe colectiva que ha persistido a través de los siglos.

Y de aquí vino la reconstrucción, supervisados por el Virrey de aquel entonces, a quien se le dio el título nobiliario de "Conde de Superunda" por su esforzada labor .

EL CASO ES QUE

Se pensó que el mes de octubre era de ocurrencia de terremotos, pues se habían dado en el 19 en el año 1609;el 20 de octubre en el año 1,687; el 28 en el año 1,746; el 17 de octubre en el año 1,966 y el 3 de octubre del año 1,974.Por ello muchos, luego de este último sismo, empezaron a creer que cada 4 años se repetirían los mismo .( hubo uno en mayo del 70 con total destrucción de Yungay).

ALGUNOS ADICIONALES

Lo interesante y que no está colgado en el Internet, es que similar susto tuvo la población del Callao a mediados de los años 50 cuando se señaló que un maremoto amenazaba a La Punta y por ende al Callao, pues había habido un sismo fuerte en el Japón. Se dice que la mayoría de la población hicieron un éxodo a Magdalena y San Miguel, cuando no a otros distritos, caminando por la Avenida Costanera, pues no existía aun la Avenida La Marina.Para suerte de la población, a eso de la 4 am se anunció via las radios; que la gigantesca ola había perdido fuerza al encontrar una serie de obstáculos que impidieron su velocidad , que se calculaba era de 100Kms/hora. Luego de eso se registró un perverso terremoto en el año 1940, el 26 de mayo con 8.2 grados en la escala de Ritcher en plena guerra mundial, que mató a mucha gente adicionalmente por enfermedades infecciosas y la falta de medicamentos. Y ya de lo que se recuerda  y registra, hubo terremotos en el año 1966 con 7.5 grados el 17 de octubre a las 16:41 con epicentro en Huacho y que dejó 258,000 damnificados ;luego el de 1970 , un 31 de mayo en que estábamos en el mundial de fútbol y que fue de 7,9 grados, pero allí la tragedia fue el desprendimiento del Huascarán que arrasó con la ciudad de Yungay.  Luego tuvimos otro terremoto en el año 1974, el 3 de octubre en que se celebraba el 6to año de la Revolución de Velasco Alvarado, ello fue a las 9:21 am y tuvo asimismo 3 meses de réplicas y como 300 mil damnificados . Finalmente hemos tenido en Lima, pero con grandes pérdidas de todo tipo en Pisco e Ica, el terremoto del año 2,007 el 15 de agosto a las 18; 40 con un grado de prácticamente 8 en la escala de Richter y que tuvo fuertes consecuencias . De alli hay un silencio sísmico, pero Chile ha tenido dos terremotos fuertes y Ecuador hace muy poco, otro sismo que fue asimismo de gran magnitud. 

DEBE QUEDAR CLARO QUE

Aunque un terremoto no se puede predecir, Y para muestra está el silencio sísmico de más de 100 años del terremoto de San Francisco ocurrido el 18 de abril del año 1906, debido a la falla de San Andres y que causó mas muertes de lo que en un inicio se creía y eso si la destrucción de 250,000 hogares cuando solo había en aquella época una población que no llegaba en dicha ciudda a 400 mil familia :Wikipedia nos muestra esto:

Después del terremoto, un ingeniero llamado Herman Schussler, exploró la falla de San Andrés que corta a través de la montaña de la cordillera de la costa. En 1908, testificó ante una corte de Distrito Norteamericana de San Francisco acerca de lo que vio:

"La característica más notable fue que las montañas del este se acercaron cuatro pies y medio a las montañas del oeste" explicó Schussler ante la corte. Piensen en eso. En sólo un minuto las montañas enteras se habían movido unos pies.

"Si San Francisco hubiera estado en o cerca de la falla no habría quedado nada de ella", continuó Schussler.

Después del terremoto y de los fuegos, más de 500 manzanas de la ciudad de San Francisco estaban en ruinas. Más de la mitad de la población de la ciudad quedó sin hogar. La gente vivía en tiendas de campaña y otros albergues, y cocinaban al aire libre. Con todo, a pesar de la devastación, no tardó mucho para que la gente comenzara a recoger los escombros.

"San Francisco está comenzando a levantarse de sus cenizas nuevamente", escribió Samuel Fortier, profesor de UC Berkeley, una semana después del terremoto y de los fuegos. "No hay falta de confianza", añadió. "El valor de la gente es simplemente notable. Los miles de personas que han perdido casi todo lo que poseían están maravillosamente alegres, y raramente se oyen lamentos".

EL ANUNCIO DE BRADY

Un grupo de geólogos norteamericanos vovió a insistir en Washington que Perú sufriría en el próximo mes de septiembre de 1981 ,el peor terremoto del siglo, y que el temblor alcanzará el grado 9,9 en la escala de Richter (eI terremoto que asoló la región italiana de Nápoles alcanzó el grado 7 en la misma escala). Brian Brady afirmó que los primeros temblores se registrarán cerca de Lima, a finales de julio, y alcanzarán entre 7,5 y 8 grados en la escala de Richter.«Tras cuarenta días de enormes disturbios sísmicos se producirá otro temblor, hacia el 10 de agosto, cerca del epicentro de otro que ocurrió en 1974. Este alcanzará los 9,2 grados, y treinta días después se producirá un tercer temblor, el peor, que se extenderá desde la costa peruana hacia el centro-norte de Chile, con una intensidad de 9,9 grados».

Este último temblor será comparable al ocurrido en Chile en 1960, que causó la muerte de 5.700 personas.

UNA ANÉCDOTA

La periodista de Frecuencia Latina, Claudia Cisneros, pidió disculpas públicas por un falso pronóstico difundido la noche del miércoles en el noticiero "90 segundos", sobre un supuesto terremoto de 9.9 grados Richter que devastaría el Perú en el mes de setiembre.

"Lamentamos la alarma que esta información pudo haber causado en todos ustedes y les pedimos disculpas por este error", sostuvo Cisneros.

Como se recuerda, Cisneros difundió una información la cual se basó en una publicación del diario español "El País" sin percatarse que dicha noticia correspondía a enero de 1981, en la cual afirma que "el Perú sufriría en el próximo mes de septiembre el peor terremoto del siglo".

"Damos esta información no en son de alarma, simplemente de alerta y para que estemos prevenidos", señaló la periodista, con lo cual se desató una natural preocupación entre la población.

El artículo contiene declaraciones del geólogo estadounidense Brian Brady, quien señaló que el sismo "alcanzará una intensidad de 9.9 grados y se extenderá desde la costa peruana hacia el centro-norte de Chile".

LA MOCHILA

El caso es que luego del temblor ayer, nuevamente vino el tema de la mochila de emergencia, que se señala es uno de los artículos indispensables frente a una situación sísmica y la que debe contener elementos que puedan mantenernos a salvo por al menos 24 horas, así como también una caja de reserva que puede socorrernos por hasta cuatro días.

La mochila de emergencia debe de ser cómoda y grande pero su peso no debe exceder los 20 kilos, ya que nos impediría movilizarnos con la facilidad y rapidez que el caso requiera. Asimismo el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) recomienda participar en los simulacros que se convocan para saber cómo actuar ante este tipo de eventos, conocer las rutas de evacuación (de tu casa, centro de trabajo o estudios) e identificar las zonas seguras. Sin embargo, también es importante tener lista una mochila de emergencia.

Rosario Guevara, representante de Indeci, explicó a El Comercio que toda familia debe contar con una mochila para sobrevivir las 24 horas siguientes a un fuerte sismo. El kit, dijo, debe de estar compuesto principalmente por agua, alimentos no perecibles y un botiquín.

"Hay que incluir artículos de aseo como cepillo de dientes, peines, toallas y jabón para estar libre de gérmenes", refiere Guevara para luego agregar que es necesario incluir algunos medicamentos.

La especialista del Indeci indica además que se debe tener una radio a pilas. ¿La razón? Así podremos escuchar las noticias sobre el sismo y las indicaciones que darán las autoridades durante la emergencia, arguye Guevara.

Finalmente dijo que se debe guardar una linterna y bolsas de plástico para almacenar los residuos sólidos.

MI COMENTARIO

La idiosincrasia del poblador limeño y posiblemente del Callao, me parece que es “ después de robado candado”. Es tragicómico que siendo la población en Lima metropolitana de unos 10 millones, se de la recomendación de no salir corriendo de edificios y colocarse en las habitaciones que tengas vigas y columnas. Pero ¿ no es que en los distritos populosos, hay edificaciones hechas a la buena de Dios o que incluso hay edificios nuevos que muchos piensan que no han tenido la debida supervisión y algunos cerca de acantilados en Miraflores o Barranco?. En el colmo la pregunta es :¿ Esa mochila que probablemente los pobres que están a niveles de salarios, incluso debajo del mínimo, si la compraron alguna vez, la siguen manteniendo o tal vez ya se las robaron? La verdad es que no entiendo. Al menos el Indeci en vez de tanto hablar y recomendar esa bendita mochila que ellos mismos señalan dura entre 1 y 4 dias ; debería encargar una encuesta a ver cuántos de los pobladores de escasos recursos la tiene o siquiera la compraron una vez. Basta de tanto floro y a trabajar. Porque sino después de robado, candado. Ah y la maraña de cordones que hay en los distritos para luz, cable, teléfonos; amen de los tubos de gas que PPK quiere hacerlos masivos en los distritos pobres y subsidiando la instalación: ¿ son antisísmicos? ¿Quién supervisa eso ah? Dios, en verdad, nos tenga en sus santísimas manos. Porque sino y pese a eso de "guerra avisada, no mata gente" ; sólo si no se supervisa las masivas instalaciones de gas que propone este gobierno ( ojo el anterior permitió uno en la pista N. 2 para el aeropuerto Jorge Chávez) mas vale que repasemos aquello del coliseo romano, con lo de  César, los que van a morir te saludan. No queda otra, pues somos flor de improvisación e ineficiencia.Mira tú que en los 100 días de este PPK& Asociados , ayer se presento "Giufrita"  el ministro de la producción ( el chiquito ese de la TV , que tiene un gemelo) y vaya parece que está haciendo su chamba OK. Otro también es el de 2 metros Thorne, el bandido N. 2 , quien pese a que la Chacon le envió 22 preguntas para el tema de los bonos soberanos; este largirucho "soberanamente" ya se mando con una emisión de S/ 750 millones más , pues caja le falta, ya que parece que los Humala/Heredia la barrieron y su PPK  sigue meciéndonos con su supuesto pacto con ese par de sinverguenzas. ¡Qué pais por Dios¡ y perdemos horas con el BCRP, cuando tenemos al monarca Velarde, el gordo bandido, tres veces coronado como Presidente del Instituto emisor, que por propias declaraciones de este Monarca, el Central  no hace ni michi por el crecimiento del PBI. Así para qué tanta agitación, opinión y horas de políticos y opinólogos en los medios. Mejor chequeen el tema de la mochila. No vaya a ser otro negocio de la que te jedi, vale decir la marabunta de la Doña Heredia.  


Escrito por

dennis falvy

Economista de la Universidad Católica con un master en administración en la Universidad de Harvard; periodista en economía .


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